Hoy Canadá celebra su día nacional, y es la ocasión perfecta para conocer uno de sus rincones más singulares: Tilting, un pequeño pueblo pesquero en la isla de Fogo, al este del país, en la provincia de Terranova y Labrador. Tilting fue colonizado por inmigrantes irlandeses en el siglo XVIII y ha conservado hasta hoy su herencia cultural. Sus casas de madera, pintadas en rojo y blanco como la bandera canadiense, destacan entre el paisaje rocoso y el Atlántico norte. Estos colores, además de su belleza, tenían una función práctica: facilitaban la orientación durante la niebla o las intensas nevadas.